Capítulo 37 La entrega(I)
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- “Dime”
Había reconocido el número de Carlos al coger el móvil y lo sujeté con mi hombro mientras continuaba hurgando en los archivos del año anterior, me hallaba enfrascado en la búsqueda de un historial que no aparecía y omití los saludos de rigor.
- “Buenos días, ¿te interrumpo?, me ha dicho Carmen que te llamase para quedar luego” – me noté irritado, apenas eran las diez de la mañana y ya habían hablado, ese tipo de cosas me seguían produciendo una atávica emoción de invasión de mi territorio que no me resultaba fácil de controlar.
- “La voy a recoger a las tres y media y luego pasamos a por ti”.
- “¿Y por qué no quedamos tu y yo antes y vamos juntos a por ella? Seguro que la sorprendemos”
Dejé el archivo y me levanté, su propuesta me hacía dudar, Carmen quería mantener cierta distancia con Carlos, no quería encontrársele un día en el portal del gabinete o en la puerta de casa; cuanto menos supiera de su vida mejor, decía.
- “Voy a andar justo de tiempo, mejor lo hacemos como te he dicho” – Carlos debió intuir las verdaderas razones y evitó insistir.
- “Como quieras, os estaré esperando en la cafetería del hotel, me das un toque al móvil y salgo, para no haceros esperar.
- “Perfecto, entonces nos vemos luego…”
- “Mario… si tienes un minuto más…”
- “Por supuesto” – dije intentando adivinar que quería.
- “Verás… yo nunca he estado en… una situación así, no estoy seguro de cómo actuar delante de… los dos, es complicado”
¡Dios! ¡Yo tampoco sabía cómo actuar cuando estuviésemos los dos frente a ella!
Pero no podía descubrir mi inexperiencia ante un trío, si lo hacía quedaba en entredicho toda nuestra historia; Decidí improvisar mostrando una seguridad que no tenía pero que esperaba fuera creíble ante la evidente falta de experiencia de Carlos.
- “Déjate llevar, somos tres personas adultas…”